Ahora, él y Marilyn trabajan en el ministerio de mayordomía en Summit, asesorando a otras personas sobre los principios financieros personales que honran a Dios. Mientras Jonathan aconsejaba a la gente en la iglesia, también sintió que podía ofrecer algo a sus compañeros de trabajo, que a menudo hablaban de sus luchas financieras.

"Oía a la gente hablar de que se les había cortado la luz o preocuparse por el retraso de una paga", dijo. "Y pensé que podía hacer algo para ayudar".

Utilizando lo que había aprendido de la Universidad Financiera de la Paz y del ministerio de mayordomía, Jonathan presentó una propuesta de formación a su jefe. Al principio, se mostraba escéptico ante la idea de realizar una formación en la que no podía mencionar a Dios o su fe de forma explícita.

Jonathan oró, pidiendo a Dios que le dejara muy claro si debía o no hacer los entrenamientos para sus compañeros de trabajo. "Dios ha estado muy presente en todo esto. Respondió a la oración de forma muy tangible para mí", dijo.

Blair Graham, Pastor de Mayordomía y Generosidad, también le animó a utilizar sus dones, diciendo: "Dios va a estar ahí cuando hables".

Una vez que el trabajo de Jonathan aprobó su propuesta, empezó a hacer grandes entrenamientos dos veces al año a partir de 2017. En cada entrenamiento, cubre los aspectos psicológicos del gasto de dinero, cómo establecer un presupuesto y otros pasos positivos, como el pago de la deuda.

Desde entonces, sus compañeros de trabajo se han acercado a él para compartir su alegría tras abrir una cuenta de ahorros, crear un presupuesto por primera vez, recortar su factura telefónica o replantearse sus gastos.

Después de una de sus formaciones para empleados en Chicago, una persona le dijo: "Sé que Dios te envió porque realmente necesitaba escuchar esto".

Dada la incertidumbre financiera a la que se enfrentan muchas familias durante la pandemia de COVID-19, Jonathan compartió recientemente consejos financieros con todos los que han participado en la formación. También incluyó algunas orientaciones sobre la sabia administración del cheque de estímulo que muchos de ellos recibieron.

Jonathan encarna los valores de Summitde hacer discípulos y vivir en misión, usando el conocimiento que Dios le ha dado para bendecir a otros. Ha tenido nuevas oportunidades para mantener conversaciones espirituales y ejercer una influencia piadosa en la vida de las personas que de otro modo no tendría. 

Anima a los que pasan por dificultades económicas a buscar a su comunidad eclesiástica y acudir a Dios con sus cargas.

"Reza con constancia: acude a tu Padre, él lo sabe. Y estate abierto a decir [a los demás] 'necesito ayuda'".

Marilyn y Jonathan instan a quienes tienen experiencia en la administración financiera a utilizar esos dones para bendecir a otros.

"Creo que esto puede ser un gran estímulo para que nuestra gente sirva en las áreas a las que Dios les ha llamado y les ha dado una pasión, incluso si no pueden compartir directamente el evangelio en un sentido tradicional", dijo.  

"Ya sea en su lugar de trabajo, en su vecindario, en su escuela o en otras áreas de influencia, Dios está en ellos y puede obrar de manera realmente poderosa a través de ellos".