Dar consistentemente a su iglesia es un gran paso en su salud financiera.
También es el primer paso.
Muchos luchan con la idea de dar a su iglesia. Hay una barrera entre ellos y el plato de ofrendas (o el sitio de ofrendas en línea).
A menudo las excusas para no dar se basan en un malentendido de las Escrituras o un malentendido de su iglesia.
Aquí hay cinco malas excusas para no dar a su iglesia:
- Dios no nos dice que demos. Usted se pregunta si la Biblia realmente nos ordena dar. La realidad es que la Biblia está llena de versículos sobre la generosidad. Desde Proverbios 3:9 hasta 1 Timoteo 6:17-19, Dios demuestra que fuimos diseñados, no para ser acaparadores, sino conductos a través de los cuales fluye Su generosidad. He aquí algunos versículos sobre la generosidad que se encuentran en la Biblia.
- No gano suficiente dinero. Sientes que el dinero es demasiado escaso en este momento, y que dar es para los que tienen excedentes. En el primer punto, vimos cómo la Biblia nos dirige a dar. Al leer los versículos sobre dar, notará que falta algo: una cláusula de exclusión. En Lucas 6:21-14, vemos que Jesús elogia a una mujer pobre porque dio, no de sus excedentes, sino de su pobreza. Cuando la Biblia habla de dar, no hay "fuera". No hay lagunas ni cláusulas de exclusión. Al contrario, los que dan por sacrificio son más celebrados que los que dan por abundancia.
- Estoy endeudado. Sientes que tu primera obligación debe ser pagar la deuda. Si bien es cierto que debes pagar las deudas, dar sigue siendo una prioridad. No debes dejar que una mala decisión financiera (contraer una deuda importante) te lleve a tomar otra mala decisión financiera (no dar).
- Mi dinero no marcará la diferencia. Sientes que tu pequeña donación no significa realmente mucho para tu iglesia. Como ex pastor administrativo de una iglesia, puedo decirte que realmente hace una gran diferencia. Es increíble lo que Dios hace cuando muchas personas dan una pequeña cantidad de dinero. Él toma los regalos y multiplica su impacto en el Reino. La gente escucha y confía en Jesús como su Salvador. Los matrimonios se arreglan. Las adicciones se rompen. Los hambrientos son alimentados. Y todo porque tú diste.
- Sé administrar el dinero mejor que mi iglesia. Usted cree que sabe cómo invertir su dinero para lograr un impacto mejor que el de su iglesia. Me parece que la mayoría de las veces, esto se debe a que el donante no entiende o no ve el impacto del Reino de su iglesia, a menudo debido a la falta de participación. Sólo en muy raras ocasiones recomendaría dejar de dar a la iglesia. Y en esas situaciones, recomendaría simultáneamente encontrar otra iglesia. En la mayoría de las ocasiones, esto es lo que recomiendo: reunirse con un pastor para conocer el impacto de la iglesia y participar. Su participación probablemente le abrirá los ojos y los oídos a lo que Dios está haciendo realmente a través de la iglesia.
Si no estás dando a tu iglesia local, tómate un tiempo y considera cómo Dios habla de la generosidad en la Biblia. Habla con tu pastor sobre ello.
Y participa.
No dejes de participar financieramente en tu iglesia local. La salud financiera no termina con la generosidad, sino que comienza con la generosidad.
Escrito por Art Rainer, miembro del Equipo de Liderazgo del Ministerio de Mayordomía y Generosidad de Summit .
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