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Descripción
Puede ser tentador pensar que hemos estropeado las cosas sin remedio, que seguramente Dios ha terminado con nosotros esta vez. En el mensaje de esta semana de Jonás 3, el pastor Bryan explora la hermosa verdad de que servimos a un Dios que se deleita en dar segundas oportunidades, porque es rico en misericordia. Y es precisamente esta misericordia y bondad -no la culpa ni la condena- lo que nos lleva al arrepentimiento.