Todo el mundo necesita a alguien que crea en él, especialmente cuando la vida le ha derribado. Para algunas personas que atraviesan una crisis, el estímulo y el apoyo oportunos de los demás pueden hacer que se renueve la fe en Dios y en la humanidad. Allison*, miembro de Summit , conoció a Tori por primera vez en 2014, cuando la contrató como diseñadora de interiores para que le ayudara a decorar su casa. Rápidamente descubrieron que disfrutaban de la compañía de la otra y pronto se convirtieron en amigas íntimas. Entonces, la vida de Tori se descontroló de repente, ya que experimentó un divorcio complicado, un declive en los negocios e incluso la pérdida de su casa. Al verse sin hogar, recogió sus pertenencias y se mudó a un motel con sus tres hijos pequeños. Al enterarse de su situación, Allison, así como sus familiares y amigos, se ofrecieron inmediatamente a ayudarla. Como el divorcio afectaba negativamente a su calificación crediticia, Tori descubrió que tendría que pagar una fianza doble y varios otros gastos cuando finalmente encontrara una vivienda asequible. Allison y otras personas intervinieron para ayudar con este gasto inesperado, lo que permitió a Tori y a sus hijos asegurarse el apartamento. Cuando llegó el día de la mudanza, su fiel amiga fue la única que la ayudó a trasladar sus muebles, pero varios vecinos nuevos del complejo de apartamentos se unieron rápidamente para ayudar a las dos mujeres. Al notar su actitud amistosa y servicial y el tatuaje de un pez en el brazo de un hombre, Allison se aventuró a preguntarle si era cristiano. Resultó que estos vecinos no sólo eran creyentes, sino que también eran miembros de Summit. Después de haber estado rezando para que Tori alcanzara la fe plena, Allison se alegró mucho al darse cuenta de que Dios estaba mostrando el amor de Cristo a través de unos perfectos desconocidos. Después de que Tori empezara a llevar a sus hijos a la iglesia, le confió a Allison que estaba "impresionada" tanto por la música como por el mensaje. Un día confesó: "Dios está actuando en mi vida. Para otros puede sonar extraño, pero tú lo entenderás. Siento su obra, su mano y su gracia en todo lo que he hecho". Mientras Tori sigue asistiendo a Summit, Allison reza para que Dios siga revelándose a ella. "Se están plantando semillas en la vida de Tori", dijo Allison. "Quiero vivir mi fe delante de ella y rezar para que Dios continúe trayendo oportunidades para compartir su amor con ella". *Los nombres han sido cambiados por razones de privacidad. Por Elizabeth Ashford